Para Que Sirve La Cultura Empresarial?
Juanfrancisco Agüero
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Cultura empresarial: qué es y en qué consiste – Antes de nada, veamos la definición de cultura empresarial: Una cultura empresarial o cultura corporativa hace referencia a todos los valores, creencias, acciones, pensamientos, metas o normas que comparten los miembros de una misma organización.
- La cultura empresarial define la personalidad de una organización, así como su ideario,
- Y esto se ve reflejado en cualquier acción llevada adelante por los trabajadores.
- Es decir: desde cómo dirigirse a los clientes, hasta sus propios compañeros; pasando por las prioridades de la empresa.
- Cabe destacar que, pese a que algunos utilicen el término “cultura organizacional” como sinónimo de “cultura empresarial”, no es del todo correcto.
El primero va más allá, porque incluye todo tipo de organizaciones. También aquellas sin ánimo de lucro. Gestiona el talento de tu empresa desarrollando su carrera profesional
¿Qué es y para qué sirve la cultura organizacional?
Eslabón | Funciones de la cultura organizacional La cultura organizacional sirve para definir las características que hacen única a una empresa, establecer reglas y transmitir sentido de pertenencia a todos los miembros de la organización, así como fortalecer su compromiso con esta.
- En resumen, ayuda a distinguir lo que es importante para las empresas.
- Con una buena gestión de la cultura organizacional, se incrementa la comunicación y buena relación entre los empleados, los hace entender claramente cómo sus funciones o tareas contribuyen al cumplimiento de las metas de la empresa, lo cual los motiva a aumentar su productividad.
Algunas otras funciones importantes para la organización, son:
Servir como base para configurar las políticas de las empresas y los paradigmas fundamentales.Establece criterios y reglas de acción para un mejor desempeño, por ejemplo, los manuales de operación técnica y guías de trabajo.Ofrecer un valor agregado a sus productos y servicios, ya que estos suelen estar hechos con extremo cuidado al detalle y el cumplimiento de las normas de calidad.Ejercer control y modelar el comportamiento y caracteres de los empleados a través de parámetros de conducta.Fortalece la unión en la organización y las buenas relaciones, basadas más allá de aspectos meramente laborales.Enseña a quien se integra a una empresa las formas de actuar, pensar y sentir; necesarias para una correcta adaptación.Comunica los paradigmas de la organización: visión, misión y objetivos generales, con la intención de que los colaboradores los identifiquen e interioricen. Mantiene un clima de transparencia, accesibilidad y apoyo entre los empleados.
Como vimos anteriormente en ” “, todas las organizaciones tienen una cultura, aunque no haya sido planificada. Sin embargo, fortalecerla permite un mejor manejo del talento humano y recursos en función de los objetivos, crea la necesidad de buscar la mejora continua de los procesos y de la empresa, a través del trabajo individual, en equipo, el consenso, compromiso y pensamiento estratégico de sus integrantes.
En Eslabón contamos con herramientas que facilitan el fortalecimiento de la cultura en las empresas, integrando varios módulos de organización, gestión de recursos humanos, control de accesos y tiempos, que brindan información útil sobre la estructura organizacional para una mejor toma de decisiones.
Aquí encontrarás más información sobre cómo implementar el sistema eslabón en tu empresa. : Eslabón | Funciones de la cultura organizacional
¿Cuáles son los beneficios de la cultura?
La cultura y sus beneficios intangibles No es fácil medir los beneficios que el arte y la cultura le aportan a una sociedad en términos prácticos o monetarios, y por eso los presupuestos destinados a su desarrollo suelen ser medidos y escasos, así como los más afectados en tiempos de crisis.
Como los indicadores de producción y acceso a los bienes y servicios de la cultura no siempre evidencian de manera obvia su relación con el desarrollo social o económico de los países, se vuelven difíciles de dimensionar. Intuimos por ejemplo, que un alto índice de lectura repercute positivamente en la calidad de vida de la gente, aunque no necesariamente sean los países más desarrollados los que tengan los índices de lectura más altos.
Ahora que de cara al posconflicto en Colombia la sociedad y los medios empiezan a pedirle cuentas al Ministerio de Cultura con respecto al rol que deberá cumplir, sería muy útil empezar a pensar seriamente la relación cultura-Estado, cultura-política y cultura-desarrollo, como tal vez no lo hemos hecho hasta ahora.
“La cultura aún no logra ser percibida a nivel político y económico como un derecho social y un elemento central de desarrollo”, escribió María José Egaña —presidenta de la asociación de gestores culturales de Chile— en una carta al diario El Mostrador, cuando el presidente interino de Brasil anunció hace un par de semanas el cierre del Ministerio de Cultura como medida de emergencia.
Y como la cultura no logra posicionarse en un rol protagónico, corre el riesgo de vivir convertida en una especie de cuota política mínima de popularidad. Ante el anuncio del cierre de la cartera cultural en Brasil todo el mundo saltó —los artistas se tomaron el Palacio de Capanema y una bancada de músicos legendarios de bossa le dirigió una carta al gobierno para protestar— y entonces Temer no tuvo más remedio que retroceder.
- Algo parecido pasó en Bogotá, cuando el Idartes anunció la fusión de tres festivales en uno — “Jazz”, “Salsa” y “Colombia al Parque”— y ante las reacciones negativas de la gente a los pocos días la alcaldía siemplemente se retractó.
- Para que la cultura no se vuelva una especie de ficha de cambio políticamente correcta, debería existir un entendimiento más estructural y profundo del tema; pensar mejor cómo deberían articularse estas políticas con el resto de políticas públicas, y considerar en su real dimensión la utilidad de sus aportes.
Los beneficios de la cultura son intangibles pero no por eso invisibles. Como dice el filósofo Nuccio Ordine en su obra La utilidad de lo inútil, la producción artística y cultural deberían ser un fin en sí mismas, pero eso no significa que sus contribuciones al cultivo del espíritu y al desarrollo civil no sean útiles y necesarias.
- La cultura tiene el poder de generar cohesión social e identidad, e incentivar la participación ciudadana.
- También tiene el poder de curar heridas a través de la narración y la memoria, algo que sin duda vendrá bien en el posconflicto.
- No hay que perder de vista, sin embargo, que en este momento el presupuesto del Ministerio de Cultura es equivalente al 1% del presupuesto para la guerra (el Ministerio de Defensa recibe 30 billones anuales mientras que MinCultura, 330 mil millones) y al 33% del presupuesto total de la Secretaría de Cultura Recreación y Deporte de Bogotá (que cuenta con 1,18 billones de pesos anuales).
MinCultura ha planteado que para el posconflicto planea intensificar la política de fortalecimiento de patrimonio cultural que ha venido llevando a cabo en distintos lugares del país, así como el desarrollo de infraestructura y su plan bandera para la lectura, lo cual aunque poco espectacular tampoco parece ser una mala idea.
Pero ahora que empieza a haber más expectativa que nunca frente a las entidades culturales del país, el Ministerio sí podría tener un papel más protagónico a la hora de posicionar un debate al respecto, demostrar la importancia del tema en esta coyuntura, y ubicar su cartera como herramienta imprescindible en la transformación social del país.
: La cultura y sus beneficios intangibles
¿Cómo se desarrolla la cultura empresarial?
Las empresas, independientemente de su tamaño, son llamadas a representar unos valores, hábitos o costumbres que garanticen la identidad de grupo. Las individualidades aportan valor al equipo y a la organización, pero la imagen que se perciba en el exterior repercutirá sobre el conjunto.
- Por ello, son necesarias unas pautas que garanticen la percepción de una cultura empresarial global.
- Todos los miembros de una empresa deben trabajar para lograr una meta global común, sea la que sea, y la cultura empresarial debe ayudar a conseguirla.
- Siguiendo una misma misión, una misma visión y un conjunto de valores que deben ir acorde a la imagen que la empresa quiere transmitir.
La cultura empresarial corporativa, comienza dentro de la propia empresa. Para lograr una cultura empresarial fuerte, todas las personas que formen parte de la empresa deben estar convencidos de esos valores y creencias que rijan la organización. Si los empleados o directivos no respetan la cultura corporativa o no se sienten partícipes, ésta puede debilitarse repercutiendo en el funcionamiento general de la empresa e incluso en la imagen proyectada a nivel global.
Pero, ¿cuál es el primer paso para construir una cultura empresarial global? Pues aunque parezca obvio, lo primero deber ser definirla. En muchas ocasiones ni siquiera se habla de este concepto corporativo, dándolo por sentado. En una pequeña organización, esto puede ser suficiente, pero ante una mediana o gran empresa, no definir una cultura corporativa y no comunicarla internamente puede suponer la diferencia entre el éxito y el fracaso.
Imagina una empresa en la que todos remen en direcciones contrarias. En la siguiente infografía, “Cómo se construye una cultura empresarial global”, destacamos 6 puntos clave a tener muy en cuenta: Las empresas, independientemente de su tamaño, son llamadas a representar unos valores, hábitos o costumbres que garanticen la identidad de grupo.
Las individualidades aportan valor al equipo y a la organización, pero la imagen que se perciba en el exterior repercutirá sobre el conjunto. Por ello, son necesarias unas pautas que garanticen la percepción de una cultura empresarial global. Todos los miembros de una empresa deben trabajar para lograr una meta global común, sea la que sea, y la cultura empresarial debe ayudar a conseguirla.
Siguiendo una misma misión, una misma visión y un conjunto de valores que deben ir acorde a la imagen que la empresa quiere transmitir. La cultura empresarial corporativa, comienza dentro de la propia empresa. Para lograr una cultura empresarial fuerte, todas las personas que formen parte de la empresa deben estar convencidos de esos valores y creencias que rijan la organización.
Si los empleados o directivos no respetan la cultura corporativa o no se sienten partícipes, ésta puede debilitarse repercutiendo en el funcionamiento general de la empresa e incluso en la imagen proyectada a nivel global. Pero, ¿cuál es el primer paso para construir una cultura empresarial global? Pues aunque parezca obvio, lo primero deber ser definirla.
En muchas ocasiones ni siquiera se habla de este concepto corporativo, dándolo por sentado. En una pequeña organización, esto puede ser suficiente, pero ante una mediana o gran empresa, no definir una cultura corporativa y no comunicarla internamente puede suponer la diferencia entre el éxito y el fracaso. Fuentes: Mesa Consultores (03 de Octubre de 2012). Cómo crear y mantener una cultura empresarial, Enterpreneur: https://www.entrepreneur.com/article/265516 Wikipedia (03 de Enero de 2017). Cultura organizacional: https://es.wikipedia.org/wiki/Cultura_organizacional Espinosa, Roberto (14 de Octubre de 2012).
¿Qué es cultura empresarial ejemplo?
¿Qué es la cultura empresarial? – La cultura empresarial es el conjunto de valores, ideales, actitudes y objetivos que caracterizan a una organización, Se compone de intangibles importantes que dictan cómo debe operar el equipo. En muchos sentidos, se convierte en parte de la identidad de la empresa, por lo que es importante hacerlo bien.
Cada cultura empresarial es diferente porque cada empresa es un mundo. No hay dos iguales. Cada una está formada por personas distintas y tiene objetivos únicos. Uno de los puntos más importantes a tener en cuenta a la hora de crear una cultura corporativa es asegurarnos de que todos los empleados estén representados,
Debe unificarlos e impulsarles hacia un objetivo compartido. Desde establecer una identidad de marca hasta conseguir unir a los compañeros de trabajo y aumentar su compromiso, una cultura empresarial saludable puede tener un impacto muy positivo en una organización.
¿Cuál es el fin de la cultura organizacional?
Qué es eso de cultura empresarial
Funciones de la cultura organizacional – De acuerdo con la, las funciones de la cultura dentro de una organización, son:
- Definir fronteras o crear diferencias entre una organización y las demás.
- Transmitir un sentido de identidad a los miembros que pertenecen a la organización.
- Facilitar la generación de compromiso con algo más grande que el interés individual.
- Mejorar la estabilidad del sistema social, ya que ayuda a mantener unión en la organización al proveer estándares apropiados de lo que deben decir o realizar los empleados.
- Ser un mecanismo que da sentido y control para guiar y conformar las actitudes y comportamiento de los empleados. Esta última función es de especial interés, en tanto define las reglas del juego en la organización.
¿Cómo influye la cultura en el desarrollo?
Resumen – La cultura de un país juega un papel determinante en el desarrollo de los seres humanos, sin importar la condición social o económica que estos tengan; siempre el factor cultural está inmerso en su desarrollo conductual, social y económico, que de una u otra manera influye para que las personas alcancen un nivel de vida acorde a sus condiciones donde se desarrollan.
¿Qué es una cultura organizacional resumen?
La Cultura Organizacional puede ser definida como el compendio de valores, reglas, procedimientos y principios que comparten todos los integrantes de una organización. Si eres directivo o un emprendedor, seguramente te has topado con obstáculos para llegar al nivel máximo de productividad en tu organización.
¿Qué es cultura organizacional en pocas palabras?
La cultura organizacional es un conjunto de creencias, hábitos, costumbres y valores, conocidos por todos los colaboradores de la organización y es una variable importante de conocer como futuros gerentes y para los que actualmente lo son, ya que a través de una cultura organizacional dominante se obtiene una ventaja